lunes, 31 de mayo de 2010

DARIA O EL INCONFORMISMO INTELIGENTE


En 1997, MTV produjo uno de sus mejores y más atípicas animaciones: Daria. El personaje principal de la serie, una adolescente desaliñada, inexpresiva, cínica, inteligente y que constantemente desafía a la autoridad, había aparecido antes en la exitosa serie Beavis & Butthead, donde apenas se llegó a observar un poco de su sarcástica personalidad. Esto vino a cambiar con la aparición de su propio programa.
Daria Mongerdorffer representa el inconformismo inteligente y la apatía de las nuevas generaciones, además de tratarse de la única voz coherente en un mundo idiota dominado por los padres carentes de interés por sus hijos, los quarterbacks y las porristas retrasadas y los maestros amargados. Daria y su única amiga, Jane Lane, enfrentan día a día, con sorna el reto de vivir en Lawndale, un pueblo representativo de EUA, donde los inteligentes son vistos como "bichos raros" que deben ser envíados al psiquiatra mientras que los imbéciles son dignos de admiración.
La postura crítica del programa no hace concesiones. Desmenuza el complejo entramado social de los adolescentes norteamericanos y establece una analogía entre las estructuras de poder de la escuela con la forma en la que está organizado el mundo adulto: los grupos (el club de modas, el equipo de futbol americano, las porristas, la corrupta directora de la escuela) que se oponen al sentido común de Daria y todo lo que ella representa, encuentran su igual en la realidad fuera del instituto (los adultos que normalmente aparecen en el programa son también estúpidos, autoritarios y deshonestos).
Así, a lo largo de sus cinco temporadas, los televidentes aprendimos a observar el mundo a través de los ojos de su protagonista, una mirada que no es sombría sino llena de realismo. Tras su aparente desencanto, Daria es una optimista que aún cree que las cosas pueden mejorar... cuando llegue a la universidad. Ella en definitiva representa mi ideal de mujer.
Aquí dejo el episodio piloto de la serie por si alguien quiere verlo.
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